Domingo 20 de junio de 2021
Cuando hablamos de trabajo nos referimos a una actividad esencial para la humanidad. La cual permite mejorar la autoestima, conocer nuevas personas y alcanza la estabilidad tanto económica como espiritual.
No estar a gusto con tu ambiente laboral o con tu trabajo, puede afectar seriamente tu salud psicológica. Es más, hay algunos que pueden experimentar lo que se conoce como una ergofobia.
¿Qué es una fobia?
Según el sitio Mayo Clinic, se trata de "un temor angustioso e incontrolable ante ciertos actos, ideas, objetos o situaciones, que se sabe absurdo y se aproxima a la obsesión".
El concepto de fobia es muy popular cuando hablamos de miedos más comunes entre las personas. Como la claustrofobia (miedo al encierro), pero existen otras que no aparecen en el mapa, ya que son menos conocidas. Tal es el caso de la ergofobia, que es el miedo irracional al lugar de trabajo.
Cabe destacar, que no se trata de una sensación incómoda de volver al trabajo luego de las vacaciones, sino de un tema mucho más profundo, limitante y que puede complicar mucho la vida de quien la padece.
Pero ¿Cuáles son sus causas?
Según consigna el sitio Psicología y Mente, las causas de este particular trastorno no son fáciles de determinar y suelen ser variadas. Debido a que, generalmente, una fobia es consecuencia de una experiencia traumática que ha vivido la persona.
Es por esto, que en ocasiones el sujeto puede detectar un hecho en particular que la desencadena. Sin embargo, la gran parte de las personas que la padecen no saben el por qué se ha iniciado exactamente.
Debido a esto, la fobia al trabajo es considerada compleja y en ocasiones llega a ser consecuencia de otros miedos como el de realizar presentaciones en público.
Por otro lado, también se ve asociada a problemas de autoestima, trastornos del estado de ánimo y por sentirse incapaz de realizar las funciones de un determinado puesto de trabajo por miedo al rechazo de los compañeros.
¿Cómo reconocer los síntomas?
Las personas que padecen ergofobia les inunda un profundo sentimiento de angustia contra el que tienen que luchar para continuar con su vida normal.
Este padecimiento suele presentar síntomas físicos, cognitivos y conductuales, tales como latido acelerado del corazón, respiración rápida, sudoración excesiva, ataques de pánico, malestar estomacal, dolor de cabeza o pérdida de la concentración.
¿Cuál es el tratamiento?
Según consigna ABC, para poder superar este tipo de trastorno es necesario acudir a un psicólogo para que, en primera instancia, realice un diagnóstico correcto.
Según los expertos, la psicoterapia es suficiente para superar este tipo de fobia. Sin embargo, en casos extremos se puede requerir al uso de fármacos.
Unas de las terapias que se ha utilizado en los últimos años para tratarlo son el Mindfulness y la Terapia de Cognitivo Conductual.
Ambas fundamentadas en el reconocimiento de la situación, la aceptación y el contacto con el momento temido.
