Jueves 19 de agosto de 2021
Una dramática escena se vivió hace unos días en Afganistán, en el primer día del país bajo el control de los talibanes.
Miles de personas desesperadas por huir llegaron hasta el aeropuerto de Kabul, muchos de ellos sin ni siquiera documentos de viaje o visado.
En el lugar se vieron imágenes angustiantes, con cientos de personas empujándose y trepando sobre otros para subir a un avión.
De hecho, en redes sociales se viralizaron videos donde se muestra a personas colgadas de un avión estadounidense en movimiento, reportándose posteriormente la caída de al menos dos de ellas, además de otras víctimas.
Entre esas víctimas, la Asociación Internacional de Prensa Deportiva (AIPS) informó que una de ellas fue el joven futbolista Zaki Anwari, quien había integrado la selección Sub 20 de Afganistán.
"La Dirección General de Educación Física y Deportes de Afganistán confirmó que Zaki Anwari, jugador de la selección nacional de fútbol juvenil, estaba entre los cientos de jóvenes que intentaron salir del país aferrándose a un avión militar estadounidense", anunció la cadena de televisión local Ariana News.
En la misma línea, la cuenta de Facebook del Departamento General de Educación Física y Deportes de Afganistán, dio a conocer la triste noticia.
"Con gran pesar nos enteramos de que Zakia Anwari, uno de los jugadores de la selección nacional de fútbol juvenil, murió en un trágico accidente. El fallecido Anwari, entre cientos de jóvenes que querían salir del país, se cayó y murió en un accidente de un avión militar estadounidense", comunicaron.
Zaki Anwari tenía 19 años y llegó hasta el aeropuerto de Kabul para poder escapar. Para ello se habría colgado del avión militar estadounidense C-17, que partía rumbo a Estados Unidos.
Según dieron a conocer medios locales, el futbolista habría quedado atrapado en uno de los paneles que integran el tren de aterrizaje, los cuales se cierran cuando las ruedas se retraen al momento de despegar.
Tras el aterrizaje de emergencia en Catar se pudo identificar que el cuerpo sin vida que yacía entre los paneles era el de Zaki Anwari.
